Salobreña, más allá de sus playas

Piensa en ese lugar de tu infancia en el que pasabas esos felices veranos… Cuando yo lo hago, aparecen siempre los mismos recuerdos: el cubo, la pala y el rastrillo, preparados para movilizar la arena de las playas de Salobreña.

Cuando uno es un niño, sólo piensa en jugar, no tenemos la capacidad de valorar y percibir lo que cada lugar nos ofrece. Eso, unido a que cuando se relaciona un destino, única y exclusivamente, al hecho de darse un buen chapuzón, hace que todo lo demás quede relegado. Esta reflexión me sirve para dar entrada a unos de los lugares que más veces he visitado junto a mi familia, Salobreña. Aunque claro, siempre lo había hecho sin detenerme a investigar más allá de sus playas. Seguro que no soy la única «granaina» a la que le ha sucedido. Por ello te invito a que descubras qué ver en Salobreña, además de sus playas. – Por cierto, si eres fan de los pueblos blancos de Andalucía, como es el caso de Salobreña, echa un vistazo también a Frigiliana, el Chefchaouen español -.

¿Dónde está Salobreña? Pinceladas del destino

Salobreña es un pequeño pueblo costero de la provincia de Granada. Está situado a poco más de 40 min. de Granada capital, y a una hora de Málaga. Enclavado en plena Costa Tropical, predomina el blanco de sus casas, el color crema del castillo que corona la cima del pueblo, el azul del mar… así como los vivos y variados colores de las flores y frutos tropicales que crecen en el lugar.

Su perfecta situación geográfica hace que los rayos del sol brillen casi todos los días del año, hecho que es determinante para que especies como el aguacate, la chirimoya, el mango, la papaya, el plátano y la guayaba hayan decidido instalarse aquí.

Qué ver en salobreña – Zona Alta de Salobreña

Haciendo alusión al título del post, Salobreña es mucho más que sol y playa. La ruta por Salobreña puede comenzar, o bien desde la parte alta del pueblo, o por el contrario en su zona más baja, a pie de mar. Cualquiera de las dos opciones es buena.

Un recorrido por el casco antiguo de Salobreña

Caminar por el casco antiguo forma parte de los imprescindibles que ver y hacer en Salobreña. Pronto, aun sin haber indagado mucho sobre la historia de la localidad, podrás verte sumido en la propia Edad Media, donde moriscos y cristianos se disputaban esta tierra. Aunque cabe recordar que fenicios y romanos la habitaron con anterioridad. Fue en diciembre de 1489 cuando las tropas cristianas conquistaron Salobreña.

Plaza del Antiguo Ayuntamiento

En esta plaza se ubicó la casa del Ayuntamiento – en el siglo XVI –. Tuvo otros muchos nombres como el de la plaza Pública, por ser el centro de la vida socio-política y foco económico, o también plaza de la Villa o Principal, porque por ella discurrían las principales vías que partían hacia las puertas de la antigua villa, la cual se encontraba rodeada por la extinta muralla. Intuyo que aquí es donde por las mañanas empieza el ajetreo del casco antiguo de la ciudad. Desde la plaza del antiguo ayuntamiento, dirígete hasta la calle de la Iglesia para encontrar otro de los puntos que ver en Salobreña.

Iglesia del Rosario

La primera señal que nos da una pista de que aquí vivieron los musulmanes se encuentra en la puerta de la Iglesia de Nuestra Señora del Rosario – del siglo XVI –. Erguida sobre la antigua mezquita musulmana, de estilo mudéjar, logró sobrevivir a un incendio en el año 1821. Lo que más llama la atención de esta iglesia es su puerta lateral, decorada por azulejos árabes que me recuerdan nuestro paso por Marrakech. Destaca también su larga Torre.

La Bóveda

A los pies de la Iglesia de Nuestra Señora del Rosario, un curioso pasadizo te sorprenderá, recibe el nombre de Bóveda. Un pasaje que se construyó sobre un tramo de la antigua muralla para conectar el barrio del Albaycín con el centro de la antigua Medina. Además, contribuyó a ganar terreno para la construcción de la iglesia. Si al caer la noche te encuentras todavía de visita por Salobreña, te recomiendo que lo veas iluminado.

Tu ruta por Salobreña puede continuar dos caminos: o bien siguiendo la calle Bóveda, o dirección al castillo Árabe. Si escoges la primera opción, puedes aprovechar para hacer una pequeña parada en el mítico Bar Pesetas, uno de los más antiguos. Su terraza tiene un mirador espectacular.

Si aún te quedan fuerzas, sigue caminando hasta encontrar una señal que indica que estás en el barrio del Albaycín. Continua de frente por la calle Martín Recuerda, gira hacia la derecha por la calle Ote, dirección calle de la estación, y te toparás con el mirador de Enrique Morente, con vistas hacia la vega, el mar y la Caleta.

Castillo Árabe – Castillo de Salobreña

En tu recorrido por el casco antiguo, no puede faltar el castillo que logra ser visto desde cualquier punto del pueblo. Es el monumento más visitado de Salobreña. También nos da una idea de la influencia musulmana en esta región. Tuvo su época de esplendor en los siglos XIV- XV  hasta que fue capitulado por los Reyes Católicos.

El castillo no sólo fue residencia de los familiares del Sultán, el Rey de Granada. En los últimos 50 años de la dinastía nazarí, adoptó las funciones de prisión Real para alejar a aquellos familiares del Rey que tenían intenciones de conspirar contra él. Fueron también desterrados allí muchos de los sultanes destronados. Estos eran enviados al castillo de Salobreña con el propósito de que consiguieran relajarse en sus baños Nazaríes, baños que se asemejan mucho a los ubicados en la Alcazaba de la Alhambra. Lograba así mantenerlos apartados. ¿Quién podía resistirse a un placentero baño en el Spa de esa época?

Según se relata en los cuentos de la Alhambra de Wasington Irving  – 1829 –, las princesas Zaida, Zoraida y Zorahaida, fueron obligadas por su padre, el sultán Muhammad IX, a habitar el castillo durante varios años. También, en la época cristiana, el castillo sirvió como recinto militar, indispensable para la defensa de la costa.

Paseo de las Flores

En la parte baja del Castillo se encuentra un agradable paseo que, como su nombre indica, está repleto de diferentes variedades de flores y plantas. Caminarás entre la flora y con unas vistas panorámicas de la sierra, el valle , la vega y sus  plantaciones de azúcar y frutos subtropicales.

Perderse por las calles del pueblo

La mejor manera de visitar Salobreña es de una forma «slow», sin prisa. Los barrios del Albaycín, la Loma, la fuente y del Brocal esconden calles serpenteantes, estrechas y coloridas por un sinfín de flores. Todo este conjunto invita a pasear, pese a que de primeras pienses en darte la vuelta al ver esas empinadas cuestas y escaleras. No te precipites, todo tiene su recompensa.

El barrio del Brocal fue construido aprovechando el trazado de la antigua muralla, de la que apenas quedan los restos del torreón. En este barrio se encuentran los denominados como «Arrabales«, un buen ejemplo que no puedes perderte en Salobreña es la calle Arrabal Villa A. Otra de las calles que te recomiendo es la Calle la Placeta, junto a la plaza del antiguo Ayuntamiento. Si tienes que reponer fuerzas, hazlo en la Taberna la Alhaja, asentada sobre un antiguo horno.

Si te gustan las emociones fuertes y quieres tonificar tus glúteos, sube la calle Orquídea… y luego me lo cuentas 😉

Ruta de los Miradores de Salobreña

Otro de los atractivos que hay que ver en Salobreña son sus miradores, por ello en noviembre de 2018 se estrenó la primera ruta de los «Miradores del cielo», compuesta por 9 miradores: Juan XXIII Al Salam, del Gato, Enrique Morente, Estación, de la Frascunda, Paco de la Iglesia, del Postigo, el Paseo de las Flores y de Pepa.

Esta ruta la puede realizar cualquier visitante mediante la descarga de una aplicación móvil que, a través de la lectura de los códigos QR que se encuentran situados en cada uno de los miradores, podrán obtener toda la información referente a cada enclave. Además, vía GPS irán indicando al turista la ubicación de otros miradores cercanos. La ruta se inicia desde el mirador de la calle Al Salam, pero se puede arrancar desde el punto que se desee.

Una vez explorada la zona más alta del pueblo, toca visitar la zona más próxima al mar, descendiendo por las calles del casco antiguo de Salobreña. Puedes aprovechar, si es por la mañana, para visitar el mercado municipal, en él encontrarás productos frescos y de calidad.

Qué ver en salobreña – Zona Baja de Salobreña

Parque de la Fuente

Si quieres ver una replica de la fuente del Patio de los Leones de la Alhambra de Granada, aquí la puedes encontrar.

El Peñón

El Peñón es otro de los lugares más emblemáticos. No puede faltar en tu viaje a Salobreña. En un principio fue un islote separado de la península de «Selambina», la antigua Salobreña.

Este es uno de mis lugares preferidos. Fue aquí donde probé mis primeros espetos, y donde descubrí que la fruta y la lechuga ligan a la perfección. Desde entonces, en cada visita a Salobreña, las ensaladas tropicales son plato obligado .

Desde el punto más alto del peñón, los más osados se lanzan hacia el mar, actividad que me parece de lo más peligrosa y que NO RECOMIENDO.

Playas y Calas de Salobreña

En tu lista de lugares que ver en Salobreña no puede faltar una visita a alguna de las playas y calas que conforman los 6 km de línea de costa.

• La Guardia
• Playa del Peñón
• Playa de la Charca o Salomar
• Calas del Caletón , Cala del Pargo y Cala Cambrón.
• Playa Punta del Río

Qué ver en salobreña – A las afueras

La caleta: Mi gran descubrimiento

Hay lugares que deciden aparecer en tu vida en el momento e instante preciso, esto es lo que me sucedió con La Caleta. Si no llega a ser por este viaje a Salobreña, no habría sabido de la existencia de este pequeño barrio. Para mí es un indispensable que ver en Salobreña.

El barrio de los pescadores, el barrio más dulce, a la vez que salado, de Salobreña. En él se haya el que fue un pilar muy importante para la economía del pueblo, la antigua fábrica de azúcar. La única de toda Europa que durante más de un siglo trabajó la caña de azúcar para conseguir: azúcar, mieles y alcoholes para la producción de ron. Echó el cierre en 2006 y fue catalogada como Bien de Interés Cultural de Andalucía.

No puedes perderte las fiestas de la Virgen del Carmen – son a mediados de julio –. Procesionan a la virgen entre embarcaciones, y la transportan desde La Caleta hasta la desembocadura del río, rodeada de fuegos artificiales.

La plaza del Lavadero es un buen lugar para pasear y ver cómo por la mañana llegan los pescadores con la mercancía conseguida. Como curiosidad, la plaza se encuentra rodeada de múltiples versos de famosos poetas, poemas que hacen alusión al mar.

Te recomiendo que callejees hasta los altos de la Caleta y que busques rincones tan bonitos como el de la calle Boliche. Cuando te ruja la tripa aprovecha y compra en la panadería los Tolinos dulces típicos, pan de curry, pan de tomate o tomillo… y si no escuché mal, ¡hasta de tinta de calamar!

Qué hacer en Salobreña

Rutas de senderismo

La senda mediterránea

Esta ruta circular tiene alrededor de 5,3 km. Es de dificultad baja- moderada.

Se puede realizar partiendo de la playa del Peñón de Salobreña, atravesando la playa y el barrio de La Guardia, hasta llegar a la antigua azucarera de Salobreña. Continúa hasta la Plaza del Lavadero para proseguir por una zona de especial protección de La Caleta. De esta manera se realizará de subida. Nosotros la hicimos en sentido inverso, de bajada, desde el aparcamiento del Hotel Salobreña Suites, por el camino de la izquierda. Da igual el sentido que elijas, caminarás entre las urbanizaciones y flora del entorno, siempre con vistas al mediterráneo, con unas vistas impresionantes al castillo de Salobreña y los acantilados. Una ruta que aúna paisaje agrícola y marítimo.

Ruta Botánica Parque de la Fuente- El Caletón

Comienza en el Parque de la Fuente, y se dirige hacia el sendero que une La Caleta con Salobreña, conocido como Camino del Gambullón. Continúa a través de la vega donde se encuentran plantas como la caña de azúcar, mango y palmeras de diverso tipo, hasta alcanzar La Caleta.

Al llegar a La Caleta, y paralelo al mar, transcurre un camino por los acantilados hasta llegar al Caletón, un camino que me recuerda mucho a la costa de las Islas Canarias.

Ruta de la Chirimoya. Visita fincas de cultivo subtropical

Es uno de los itinerarios más demandados, ideal para realizar un recorrido fácil de 10.6 km por la vega de Salobreña.

El itinerario comienza desde el centro de Salobreña, dirección hacia el Centro Deportivo Municipal. Luego continua por la izquierda, dejando atrás el centro deportivo, donde a los lados de un camino de tierra asoman las primeras fincas y cultivos de chirimoyas, mangos, papayas… Si se continúa caminado junto al río, llegarás a la zona conocida con el nombre de Matagallares, que se adentra en el  conocido como Camino del Canal, desde donde se podrá obtener una visión panorámica del municipio, hasta llegar a la urbanización Monte Almendros. Desde este punto solo tienes que encaminarte hasta La Caleta- La Guardia, para finalizar en el Paseo Marítimo de Salobreña.

Para saber más del cultivo de Agucate, mango chirimoya y otros frutos de la zona, recomendamos la visita guiada por la Finca Ecológica Matagallares. Juan Carlos Vinuesa Romera, te explicará todo lo relacionado al cultivo del tesoro de los frutos tropicales de Salobreña. Terminará realizándote una cata/degustación. La visita  tiene un precio de unos 6-12 euros por persona, dependiendo de la modalidad de visita que uno escoja. Para más información sobre la visita a la finca, puedes contactar a través de Jucavi-verde@hotmail.com, o llamando al 677 621 539.

Deportes náuticos

Salobreña es ideal para la práctica de deportes náuticos. En la Playa Punta del Río se encuentra el Club de Surf 18 nudos. «Un espacio natural en plena Costa Tropical, donde practicar surf, con Chill Out y música en directo junto al mar» así se describen en su web. Puedes practicar Kayak, Surf, paddle surf y kitesurf.

Mejores sitios para ver el amanecer de Salobreña

• Si la visita a Salobreña la has realizado en coche, bien merece la pena madrugar y escaparse a la urbanización Monte de los Almendros para ver cómo se asoma el rey de los astros por la colina del castillo.
• Otra vista que no puedes perderte del amanecer es desde la plaza Lavadero de La Caleta.
• O también el amanecer desde el Hotel Salobreña Suites o el Hotel Miba.

Mejores sitios para ver el atardecer de Salobreña

• No te pierdas el atardecer desde el Castillo de Salobreña.
• Desde el Bar Restaurante La Roka.
• Desde la playa del Peñón.

Qué comer en Salobreña

• Productos de la tierra en temporada: aguacate, chirimoya, papaya, plátano, guayaba, mango…
• Ensalada tropical.
• Pescados de la zona: espetos, pulpo a la salobreña, pulpo cocinado de cualquier forma, zarzuela de marisco, quisquillas de Motril…

Dónde comer en Salobreña

Restaurantes a pie de playa

En el paseo marítimo, se encuentra Casa Emilio – calle Paseo Marítimo, 5, teléfono 958 34 94 32 -, restaurante a pie de mar que abre los 365 días al año. No puedes perderte su zarzuela de marisco y su pulpo a la Salobreña, además de su ensalada tropical. Muy bien ubicado y platos deliciosos.

Restaurante la Bahía, mi predilección – calle Playa del Peñón s/n, teléfono 958 82 83 95 –. Tengo que reconocer que para mí este lugar tiene un encanto especial. Es el lugar donde solíamos comer toda la familia cuando íbamos a la playa. Fue toda una sorpresa visitarlo de nuevo y ver que había sufrido una renovación, no sólo estéticamente sino también gastronómicamente. Si ya me tenía conquistada, ahora me ha enamorado por completo.

Tiene dos zonas diferenciadas, una más tradicional, aunque con platos que parecen una verdadera obra de arte, y otra más moderna que coincide con la reciente ampliación. La ensalada tropical repleta de flores coloridas, y su ingrediente estrella, que no te voy a desvelar, es de obligada comanda. Te recomiendo también su pulpo, los tomates rellenos, sus almejas, sus postres, en definitiva, acertarás con todo lo que pidas.

Además, para los que no conciben playa sin espeto, no os preocupéis, también tienen espetos. Aquí nos enseñaron cómo cocinarlos, cómo cortar un mango y la receta de tortilla de aguacate, ¡menudo descubrimiento!

Para los más selectos con precios muy asequibles

Restaurante Arais – calle Granada 11, teléfono 958 61 17 38 -. Francisco Izquierdo está al mando de los fogones. Si quieres una aventura gastronómica, este es tu restaurante. Comerás entre una singular decoración y comida tradicional con toques vanguardistas. Recientemente ha sido galardonada a nivel provincial con el premio a la bodega con mejor selección de vinos. Son productores del Ron Mondero, un ron autóctono. Sus menús degustación rondan entre los 35 y 55 euros, nada caro para la calidad y selección de sus platos. El algodón marino es toda una sorpresa.

Bares y restaurantes del casco antiguo de Salobreña

La Roka – calle Estación, 36, teléfono 858 98 50 93 – Un restaurante con una terraza con vistas al castillo y al mar. No quiero ni imaginar cómo serán los atardeceres desde su terraza. Si esto ya te conquista, lo que de verdad te sorprenderá será su carta. Platos con nombres como la»Cabra tira pal monte», «Babuchas», «Cocretas – la RAE se lo ha buscado – de la abuela Rokera», o «Rómpeme unos huevos».

Bar pesetas – calle Bóveda 11, teléfono 958 61 01 82 -, el bar de toda la vida. Es el bar con más solera de Salobreña. Aquí los platos se aderezan con las grandes vistas desde su terraza.

Este último que te voy a recomendar no he tenido la suerte de probarlo, pero me llamó especialmente la atención por su coqueta ubicación, la próxima vez que vaya a Salobreña intentaré visitar la Taberna Alhaja.

A las afueras de Salobreña, con vistas que quitan el hipo

Miba restaurante – carretera N340, Km 325, teléfono 958 617 228 -. Posiblemente sea uno de los restaurantes con las mejores vistas de Salobreña, tiene una terraza y un salón acristalado con vistas al imponente castillo de Salobreña. Sus platos están cocinados con materia prima de calidad, no puedes perderte su atún. Tuvimos la suerte de poder visitar alguna de sus suites y su terraza chillout, con piscina mirando al mar.

Dónde dormir en Salobreña

En este viaje me alojé en el Hotel Salobreña Suites. En mi próximo viaje quiero probar el Hotel Miba, el cual me enseñaron y no veo el momento de regresar para alojarme allí.

Gracias al equipo de Turismo de Salobreña por haberme dado la oportunidad de volver a conocer de nuevo uno de los lugares que más recuerdos me trae de los veranos de mi infancia. Nunca hubiera imaginado la infinidad de rincones que hay que ver en Salobreña, además de su costa. Tenéis un pueblo y una gente maravillosa.

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